Colombia ya no es un rival sencillo para Argentina

Por Matías Orciuoli

Desde los primeros enfrentamientos entre Argentina y Colombia por la Copa América, el seleccionado albiceleste demostró una notable supremacía con respecto a su rival concretando grandes y abultadas goleadas pero, desde 1987 hasta la actualidad, el elenco “cafetero” se ha transformado en un hueso duro de roer y al que, cada vez, cuesta más arrebatarle los tres puntos.

El primer encuentro entre ambos en esta competencia se produjo el 7 de febrero de 1945, en Santiago de Chile, donde el conjunto nacional se impuso de forma categórica por 9 a 1 para decretar la máxima brecha entre estos dos equipos hasta el momento.

Luego de aquel primer histórico resultado obtenido, Argentina no hizo más que confirmar su predominio sobre los del norte de Sudamérica tanto en el torneo de Guayaquil, en 1947 donde el triunfo se selló con un marcador final de 6 a 0 como también en Lima, en 1957 con un lapidario 8 a 2; mientras que en Cochabamba (Bolivia) también supo imponerse por 4 a 2.

Sin embargo, el desarrollo comenzó a revertirse a partir de la copa de 1987 disputada justamente en tierras argentinas ya que, en el cotejo que definía la tercera plaza del certamen, Colombia sorprendió a propios y extraños al vencer por 2 a 1 y adueñarse de último escalón del podio.

A partir de allí, la albiceleste empezó a encontrar varias dificultades para sobreponerse a los “cafeteros”, obteniendo tres victorias, dos empates (ambos en la edición de 1993, primera ronda y semifinal) y una contundente derrota por tres tantos de diferencia, en Paraguay 1999.

El historial entre argentinos y colombianos por Copa América marca una clara ventaja a favor del elenco nacional con 7 triunfos, 2 igualdades y 2 caídas, en los que anotó 38 goles y sufrió 14 de su rival.

A su vez, de los 29 choques que sostuvieron en todas las competencias, Argentina se impuso en 16 ocasiones (marcó 61 goles), Colombia triunfó en 8 oportunidades (33 conquistas) y repartieron puntos en los restantes 5 encuentros.