Por Guido Plotnik
Independiente se cansó de ganar títulos locales e internacionales en su rica historia futbolística, pero hubo una primera vez en 1938, ya que dejando de lado el Amateurismo, el Rojo no había obtenido ninguno de los siete certámenes disputados hasta el momento.
Con un conjunto extraordinario que desplegaba un fútbol vistoso y efectivo (115 goles a favor en 32 fechas), los de Avellaneda se consagraron campeones en la última fecha al vencer por 8-
El equipo Granate no pudo hacer nada ante el poderío ofensivo de su rival que con 4 tantos de Vicente de La Mata , 2 de Arsenio Erico, uno de José Vilariño y otro de Antonio Sastre lo derrotó contundentemente. Los goles de Lanús los convirtieron Alfredo Cravero y Ernesto Dosetti.
Este triunfo sería la mayor goleada histórica entre estos dos equipos, pero el gran protagonista de aquella tarde fue el paraguayo Erico, que llegó a los 43 goles cuando faltaba un rato para terminar el encuentro y como la tabacalera Picardo, que fabricaba los cigarrillos 43 le ofreció un premio si lograba esa cantidad de tantos, el goleador se dedicó a asistir a sus compañeros el resto del partido.
El Granate finalizaría en el 14º puesto en la tabla de posiciones con 26 puntos, salvándose del descenso por 5 unidades, ya que Almagro obtuvo 21 puntos y fue el equipo que bajó de categoría junto al colista del certamen, Talleres de Remedios de Escalada.
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