Desde el triunfo frente a Desamparados de San Juan en el estadio de Huracán que los dirigidos por Matías Almeyda no podían conseguir los tres puntos (tres empates consecutivos ante Quilmes, Defensa y Justicia y Deportivo Merlo) mientras que su rival sumó su tercera caída como visitante en lo que lleva disputado del torneo (las anteriores contra Central y Defensa).
Estos dos equipos disputaron el duelo 149 de un historial que refleja una contundente diferencia a favor de los Millonarios, quienes, con el resultado de ayer, llegaron a 81 festejos y 291 goles marcados contra apenas 31 alegrías y 170 gritos para el elenco de La Plata. Los 37 restantes finalizaron igualados.
A pesar de haber fallado dos situaciones claras en la primera mitad, Funes Mori abrió el marcador en el complemento y así llegó a su segundo tanto en el campeonato luego del agónico empate que consiguió frente al Halcón de Varela. Por su parte, Díaz volvió a decir presente en la red y, al igual que frente a Chacarita en la fecha inicial, por intermedio de su cabeza.
El conjunto comandado por Osvaldo Ingrao sólo obtuvo un triunfo en sus cuatro salidas del Bosque y, casualmente, en los tres encuentros que cayó derrotado no pudo marcar goles. A su vez, alcanzó la misma marca que acarreaba su oponente sin triunfos. En contrapartida, los de Núñez cortaron la sequía y, a raíz de la postergación del partido entre los jujeños y el funebrero, finalizará la séptima fecha como único líder del Nacional B.
En la próxima jornada, River buscará mantener su invicto y la punta cuando visite a Ferro –probablemente en el estadio del cuervo- mientras que Gimnasia intentará poner fin a la racha adversa cuando reciba a uno de los dos equipos que aún no ha ganado en lo que va del torneo: Atlanta.
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