El Chavo vuelve a la Paternal

Por Ian Bastardo Sosa

Si bien La Plata es la cuna futbolística de Leandro Desábato, quien está muy identificado con Estudiantes, en la Paternal seguramente lo recuerdan con cariño por su paso durante la temporada 2006-2007, en la que el zaguero contribuyó para salvar a ese equipo de la Promoción. Por esto, el del lunes no será un partido más, ya que Argentinos recibirá al conjunto platense y el “Chavo” buscará cumplir con la ley del ex.

Desábato debutó en Primera División el 24 de enero de 1997, cuando Daniel Córdoba, entrenador de Estudiantes, lo alineó en el empate 3-3 frente a Unión. Apenas pudo jugar seis partidos más hasta el año 2001, cuando, sin continuidad, viajó a Bahía Blanca para ponerse la camiseta de Olimpo, club en el que hizo un gol en 23 partidos y con el que consiguió el ascenso a la máxima categoría.

Sin embargo, el defensor permaneció en la segunda divisional para ponerse la casaca de Quilmes, donde se anotó en la red una vez en 33 encuentros y volvió a conquistar un ascenso. Esta vez, se quedó en la institución y, en la temporada 2003-2004, apenas disputó seis partidos.

Para el Apertura 2004, regresó a su club de origen, aunque la segunda etapa duró poco, porque, tras salir a la cancha una sola vez en todo el torneo, retornó a Quilmes.  Allí, encontró el rodaje que necesitaba, ya que salió a la cancha en 64 oportunidades entre las dos competiciones del 2005 y el Clausura 2006 y marcó tres tantos.  Además, participó de la Copa Libertadores 2005, año en el que estuvo detenido en Brasil por discriminar a Graffite, delantero del San Pablo, en un partido de fase de grupos.

El marcador oriundo de Cafrerata desembarcó en la Paternal para la temporada 2006-2007. El Bicho, dirigido por Ricardo Caruso Lombardi, zafó de la Promoción y Desábato hizo un buen aporte, ya que en sus 34 presentaciones marcó cuatro goles. Nueva Chicago, Vélez, Arsenal e Independiente lo sufrieron.

Luego de su buena trayectoria en Boyacá y Juan Agustín García, Estudiantes lo repatrió y, desde el Apertura 2007, es una bandera de la defensa del León. Con la casaca blanca y roja, levantó la Copa Libertadores 2009 y el Apertura 2010. Por competencias locales, el Chavo marcó siete goles vistiendo los colores del Pincha y el lunes, desde las 19:30, buscará el octavo cuando vuelva a la casa que lo cobijó hace algunos años.